Desde el 15M nos hemos habituado a todo tipo de ataques mediáticos; desde el primer día en el que decenas de miles de ciudadanos tomamos calles y plazas para gritar que el presente no es el único estado posible de las cosas, nos han acusado de totalitarios, fascistas, estalinistas, antisistemas, proterroristas y un sinfín de barbaridades más. Es una reacción lógica por parte de los actores de un sistema en descomposición acelerada, que ha perdido el monopolio de la política y de la información, y como tal no le damos mayor importancia.
Picuetos nos hemos quedado, no obstante, con las declaraciones realizadas en la tarde de hoy por Angel Hernández, secretario general de Comisiones Obreras en Castilla y León.

La cúpula de CCOO Castilla y León protestando como dios manda, a diferencia de esos perroflautas del 15M, tan antisistema ellos.
En el mismo día en el que la CEOE reclama el endurecimiento de la reforma laboral -causante de un millón de desempleados en menos de un año-, el responsable sindical no ha encontrado una mejor causa que criticar al 15M con un argumentario calcado al que usa Intereconomía: cuestiona las credenciales democráticas de los que nos asambleamos, establece que la verdadera legitimidad la tiene el sistema (elevando en el proceso la cifra de electores en España a unos sorprendentes 47 millones) y concluye con el sempiterno toque paternalista: la política “de verdad” se hace dentro del sistema. Y el sistema son ellos. El resto, a callar.
Así las cosas, queremos expresar nuestro apoyo y solidaridad a los militantes de base de Comisiones Obreras (muchos muy activos en sus asambleas 15M), que han sufrido un ERE planteado por este señor aprovechando la reforma laboral que dice rechazar y que sufren el descrédito constante de una cúpula inmersa en una lucha bizantina por renovar sus privilegios en las próximas elecciones.
Asimismo, solo recordamos -a título de apunte-, que de algo serviremos. Por ejemplo, para llevar, mediante 15MPaRato, al ex-presidente de Bankia frente al juez. En el Consejo de la entidad, por cierto, tenían cabida miembros de la élite dirigente de CCOO y que, curiosamente, no vieron absolutamente nada de lo que ocurría, como tampoco lo vieron en CajaEspaña-CajaDuero, donde también tenían presencia. Miles de empleados que serán despedidos en breve como consecuencia de un ERE de proporciones bíblicas, decenas de miles de afectados por las preferentes y cien mil desahuciados se lo agradecerán eternamente.
Recordamos igualmente la reciente creación de una asociación de parados en nuestra ciudad, cuyos integrantes argumentan su necesidad en el estado de abandono, indefensión y olvido en el que se encuentra una gran parte de los trabajadores de este país. Cualquiera vería en este hecho un toque de atención importante hacia determinadas políticas e inmovilismos.
Así, nos entristece ver la desconexión con la sociedad de dirigentes como Ángel Hernández, que utiliza argumentos absolutos pero sin peso. Defendemos la política desde las personas, desde la participación y de ninguna manera aceptamos la acusación del “no nos vale nadie”. La sociedad, afortunadamente, está plagada de talento y de ilusión, pero lamentablemente la estamos desaprovechando y exportando al extranjero con nuestros jóvenes y no tan jóvenes.
Desde el 15 de Mayo de 2011 hemos estado en la calle en todas las grandes movilizaciones que se han producido en este periodo, siempre con un punto de vista crítico para con determinadas estructuras, pero entendiendo que el interés general debe prevalecer.

En esta imágen hay de todo, incluyendo militantes de CCOO. Por supuesto, el Sr. Hernández ni se acerca a estas cosas, que se le arruga el traje.
Nosotros, en fin, seguiremos luchando en la calle y en las redes, codo con codo con los compas que, dignamente, militan en sindicatos y se ven pobremente servidos por la aristocracia de la subvención y la componenda que sirve en bandeja de plata argumentos para que mercados y grandes empresas desacrediten las organizaciones de trabajadores, que son necesarias ahora más que nunca; pero no así, señor Hernández, y no con usted: Necesitan hacer una autocrítica profunda. Creemos en los sindicatos, pero no así. No todo vale.
Creía estar en un sindicato sensato, con sus fallos (en ocasiones imperdonables) pero yá se a colmado el aguante de mi paciencia.
Angelito….. que te folle un pez.
Si con toda la infraestructura que tiene el sindicato, sus liberados ,trabajasen la mitad de lo que lo hacen el 15M en la calle, en los centros de trabajo etc otro gallo nos cantaría, concienciar a la gente es lo que hace falta , y no tirar piedras a quien se mueve y lucha… Menos cafetitos, menos despachitos , menos firmitas y bajadas de pantalones y que se vea un poco mas de dignidad y de trabajo de calle de nuestros lideres sindicales.
Afiliado a CCOO – FECOHT
Entre todo lo que me da verdadera VERGUENZA en este país tambien vosotros, los sindicatos, formais parte.Manda narices.Para desgracia de todos tambien a vosotros, Angel Hernandez&cía. se os ha olvidado a servicio de quienes estais, lo que debeis defender y que somos nosotros, los ciudadanos y trabajadores, los que os hemos puesto ahí.
Sabemos que el poder corrompe, es evidente..pero lo vuestro(en concreto lo tuyo, Angel) clama al cielo..Nunca me he sentido apenas representada por vosotros, de sobra es sabido porque os moveis, cuando lo haceis, estais compradísimos y no se os cae la cara de verguenza cuando debería.Qué asco, qué pena..
Una vez mas, gracias 15M.
uhmm..los viejos poderes, los caducos, los que viven de sus rentas del pasado, se sienten amenazados….eso es que las cosas se están haciendo bien..
Muy bien dicho y muy bien expresado. Y muchas gracias por la mención a Parad@s en Movimiento. Duro y a la encía.
Yo he pertenecido durante más de 20 años a CC.OO. en el Ministerio de Cultura, una cacicada me obligó a darme de baja, pero seguí votanto CC.OO. La reacción del Sindicato en relación a Caja Madrid, Bankia y Rato, deja mucha oscuridad, sus delegados ¿que hacian?, ¿por qué no denunciaron la situación? ….. Ya no me fio de nadie.
Os felicito por haber caído por fin en la cuenta de que todo hombre ( y no digamos mujer) con poder es un peligro para los demás. Sin excepciones, sin matices. De que toda organización constituída suele traicionar tanto sus objetivos programáticos como a sus bases.
Para comprobarlo basta volver la mirada, por ejemplo, a los partidos comunistas del mundo entero, a los partidos socialistas (especialmente el español), a la iglesia de Roma, a la Falange Española Tradicionalista y de las J.O.N.S. (burda adulteración de la que fundara José Antonio), así como a los grupos no identificados, de fisonomía borrosa, digamos, que monopolizan el uso de la palabra en las asambleas del 15-M y manipulan con creciente fortuna sus votaciones.
Me temo, queridas/os, que las asambleas del 15-M van siendo ejemplo de lo mismo que ellas mismas denuncian y aquí, con indudable acierto y oportunidad, habéis dicho de la cúpula de CC.OO.
Deseo, para no perder el Norte, que el 15-m sea tan autocrítico como crítico es con las instituciones del sistema, pues no son las instituciones las que corrompen a los hombres/mujeres, sino las prepotencias individuales, con harta frecuencia groseras, barriobajeras y agresivas, las que acaban corrompiendo las mejores ideas e iniciativas.
Cuidado con los individuos que tienen “más iniciativa” que la mayoría, porque suelen despreciarla y utilizarla para erigirse poco a poco en líderes. Cuidado con los que están “siempre al pie del cañón”, porque cuando mejor les parezca exigirán compensación por ello en forma de poder y liderazgo. Cuidado con los que se toman la participación “como una actividad profesional”, porque no se conformarán con tener los mismos derechos que los demás: exigirán privilegios.
Empezando invariablemente por el más obvio, condición de adquisición paulatina de los demás: el de hablar más veces, más tiempo y en más foros que los demás miembros del movimiento, siendo así los únicos que adquieren visibilidad mediática y eclipsando a todos los demás.
Esos son los dinamiteros de la democracia, los que acaban siendo dirigentes sindicales y cosas peores.
Cosas peores como falangisas encubiertos que escriben con pseudónimos femeninos.
No digas sandeces, por favor. Ni soy falangista, ni soy comunista ni soy socialista ni soy cristiano ni si fuera algo de eso tendría necesidad de encubrirlo. Ni sabes si mi nick en falso o verdadrero o aproximativo, ni sabes absolutamente nada de mí.
Lo único que pasa es que, como tú eres de los que están al pie del cañón (la rapidez de tu respuesta te delata) te duele que alguien diga las verdades. Y más aún: que probablemente te esté desenmascarando.
Por lo demás, cuáles sean mis posiciones políticas o respecto a la religión, y cuál sea mi verdadero nombre ni pone ni quita nada al valor de verdad que pueda tener mi reflexión.
Y te advierto que es una reflexión con ánimo constructivo, por si no te has dado cuenta (recuerda aquello de que “quien bien te quire te hará llorar”).
Un saludo
Me parece lamentable que bombardeéis así a C.C.O.O., cuando es uno de los pocos instrumentos serios de combate con los que cuenta la clase obrera. Y no me vale que eximáis a las bases de toda culpa para atraeros sus simpatías. Todos los dirigentes han sido base y volverán a serlo. Así que no me vale. Creo que estáis jodiendo a la clase obrera y lo que es peor, desde dentro (desde dentro aparentemente, porque no sé lo que tendréis de obreros los que más pintáis). A ver si espabilamos, porque el enemigo está arriba, no a vuestro lado.
Eso, eso, a luchar de la mano de Angelito y, como dice su colega Juan Vicente Herrera, el “sindicalismo moderno y moderado” que representa. Pues no, mire, no me da la gana.
Sí, sí…..base cuando se jubilan después de casi 30 años liberados, durante los que se han dedicado a quitar del medio a gente muy válida para evitar que les hicietan sombra…y no perder así las comiditas, las cenitas en restaurantes que no se podrían permitir de otra manera..por no hablar de los cochazos de leasing.
Se nota que sabes de lo que hablas, afortunadamente no todos somos como la cúpula